Por Eduardo Rosa
No hay peor terrorista que un burgués con miedo. Porque ellos MATAN
¿Son muchos los 30.000 desaparecidos?
Tal vez no tantos, si los comparamos con los 60.000 de 1862/66, cuando el país era treinta veces menos poblado, sin contar con los mandados a morir en los esteros paraguayos o los Martín Fierro peleando contra el indio y exterminándose mutuamente.
Es que “la gente decente” no tolera una clase inferior que no sea sumisa y agradecida por “el trabajo” que el patrón generosamente dispensa.
60.000 desaparecidos en un país de 1.200.000 de habitantes equivaldrían a UN MILLÓN OCHOCIENTOS MIL DESAPARECIDOS hoy, que tenemos 36.000.000. – Y toda gente de campo y de una sola clase social – los gauchos -.
MANIFIESTO DEL JENERAL FELIPE VARELA A LOS PUEBLOS AMERICANOS, SOBRE LOS ACONTECIMIENTOS,POLITICOS
DE LA REPÚBLICA ARJENTINA
en los Años 1866. y 67 Potosí, Enero 1º de l868
Nota: de este escrito de Varela hecho luego de su internación en Bolivia, exiliado pero no vencido, extrajimos parte textual del capítulo V
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Ahí esta la historia: En 1862 salieron los ejércitos porteños enviados por Mitre al mando de un Coronel Arredondo, á pacificar las provincias: fué en ese mismo año que ese famoso Coronel plantó la horca, en nombre de la leí, en la plaza de la Rioja, al frente de la puerta principal de la iglesia Matriz, estrenándola por primera vez con catorce infelices, cuyos cadáveres fueron arrastrados desde la misma plaza hasta el panteón.
En ese mismo año, por orden del mismo Coronel pacificador Arredondo, los pueblos de Machigasta, Mazan y Guandacol, desaparecieron abrasados por las llamas, y se disipaban en negros torbellinos de humo y chispas, con sus sementeras y cuantos recursos de vida poseían.
En 1863, la Ciudad de la Rioja era entregada por el Jeneral Don Manuel Antonio Taboada, otro de los pacificadores de Mitre, al mas vergonzoso pillaje, al saqueo más inaudito, al par que se encerraban familias honradas en los cuarteles, entregándolas á la deprabación de una tropa inmoral y corrompida hasta el infinito.
Desde esa fecha hasta 1867, los pueblos de Famatina, Chilecito, Vinchina, Hornillos, Vichigasta y Guandacol, han presenciado los actos de barbarie mas salvaje, el martirio de mujeres preñadas, el ahorcamiento de centenares de infelices, el suplicio de viejos y de niños, el degüello, de tantos, en fin, que sería traspasar los límites de un simple manifiesto, el entrar á dar cuenta de tanto hecho atroz.
Según una estadística publicada en el “Ferrocarril” de Santiago de Chile, son 600 los infelices, mandados lancear por el Teniente Coronel Don Julio Campos, servidor de Mitre, después de la sublevación de un continjente que enviaba al teatro de la guerra contra el Paraguai en 1865 y 1866.
Pero á que entrar en estos detalles horribles, cuando ahí esta la historia sangrienta de los seis años de la administración Mitre, publicada en Chile, en que se constata evidentemente un número de más de 60.000 victimas y 202.000.000 de pesos fuertes arrebatados en multas y saqueos de la fortuna particular.
No es apuntar estos crímenes la tarea que me he impuesto y si he hecho estas lijeras indicaciones, es para comprobar con esos hechos históricos, que he hablado con verdad y conciencia, al hacer tan justos cargos á los liberticidas de mi patria, los hijos en jeneral de la Culta Buenos-Aires, los servidores del circulo del Jeneral Mitre.
En la conciencia mía han pesado todas estas terribles verdades, y por eso he declarado ante el mundo entero mi programa político, con estas palabras lanzadas desde la cumbre de los Andes: “¡Soldados federales! nuestro programa es la práctica estricta de la Constitución jurada, el orden común, la paz y la amistad con el Paraguai, y UNIÓN CON LAS DEMÁS REPÚBLICAS AMERICANAS.”
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¿Qué es una “limpieza étnica?
Eduardo Rosa – Setiembre del 2004
Manifiesto Revolucionario – apéndice el “Felipe Varela contra el imperio británico – A.Ortega Peña y E.L.Duhalde – Sudestada 1966
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